Hoy en día existen distintos tipos de tratamientos para restaurar la anatomía de las piezas dentales que se pierden. Algunos de estos tratamientos consisten en prótesis dentales y aquí es donde nos suele surgir la duda, entre una prótesis dental fija o removible ¿Cuál es mejor?

Las prótesis dentales son sustitutos artificiales de las piezas dentales naturales. Se fabrican de distintos materiales y recrean de manera realista la apariencia de a la boca.

Las prótesis dentales llevan usándose mucho tiempo en odontología, pero con los años se han ido mejorando las técnicas, haciendo de éstas algo muy importante tanto para nuestra salud bucodental como para la estética dental.

Dentro de las prótesis dentales podemos encontrarlas de dos tipos distintos: fijas y removibles. El dentista aconsejará una u otra al paciente en función de cuál le convenga más a éste. A continuación te contamos sus diferencias:

Prótesis dental fija

Una prótesis fija se coloca con la ayuda de unos implantes, que se fijan al maxilar previamente, integrándolos en el hueso. Sobre estos implantes se atornilla la dentadura. La función de los implantes que se colocan es la misma que la raíz de los dientes naturales, es decir, absorber la fuerza de masticación y el movimiento.

Cuenta con varias ventajas. La dentadura hará que se recupere toda la funcionalidad de la boca, sin notar ninguna molestia, como si de los dientes naturales se tratase. Otra ventaja es la adherencia que posee este tipo de prótesis, ya que no se despegarán las nuevas piezas dentales.

El proceso de colocación dura varios meses y una intervención quirúrgica. Otro inconveniente es que no todos los pacientes pueden colocarse este tipo de prótesis, ya que depende del estado del hueso y los tejidos.

Prótesis dental removible

Una prótesis dental removible esa aquella que podrá quitarse y ponerse siempre que se quiera y sin dificultad. Aun así, estas prótesis a día de hoy consiguen un aspecto discreto y natural.

Este tipo de prótesis pueden ser a su vez de dos tipos. Por un lado está la prótesis parcial, que sustituiría solo algunas piezas, y por otro, la prótesis completa, que restauraría todas las piezas dentales de nuestra boca.

Suelen adherirse a la boca con unos conectores. Se hacen a medida y en función de las necesidades de cada paciente, con el fin de que se adapten a la boca y no se muevan.

Se trata de una gran opción para aquellas personas que no pueden colocarse una prótesis fija, además de resultar más económica.

A la hora de la limpieza (al menos una vez al día) puede complicarse un poco el asunto, ya que es algo más costoso limpiar los dientes fuera de la boca que en la misma, como estamos acostumbrados.

Se aconseja a los pacientes que no se duerma con la dentadura puesta, ya que los tejidos que sostienen la prótesis durante el día, requieren de descanso.

Otro inconveniente que podemos encontrar, es que el paciente no llega a recuperar la fuerza original de mordida.

En cualquier caso, si estas planteando tener una prótesis y no tienes claro cuál es la mejor opción entre la prótesis dental fija o removible contacta con nosotros y te podemos asesorar sin compromiso.